El 17 de diciembre de 2021, el Tribunal Supremo de los Países Bajos (Hoge Raad der Nederlanden) se pronunció sobre la titularidad de los derechos de un productor de fonogramas. En el asunto que enfrenta, por un lado, a un DJ (demandante) y, por otro lado, a un productor de fonogramas (demandado).