España: La Biblioteca Nacional utilizará huellas digitales para prevenir los usos no autorizados de su catálogo editorial
Leire Gutiérrez Vázquez.
El 24 de octubre de 20123, la Biblioteca Nacional de España (BNE) ha publica un comunicado de prensa en el que anuncia el acuerdo alcanzado con el Centro Español de Derechos Reprográficos (CEDRO) – entidad que gestiona de forma colectiva los derechos de propiedad intelectual de los autores y editores de libros, revistas, periódicos y partituras – para reforzar la protección de las obras editoriales frente a las infracciones digitales y otros usos ilícitos, mediante la introducción de huellas digitales en su catálogo.
Sobre el funcionamiento de la herramienta desarrollada por CEDRO, la nota informa que detecta copias ilícitas de publicaciones editoriales, generando huellas digitales (secuencias alfanuméricas encriptadas) de los contenidos de autores y editores.
Además de lo anterior, en el marco del acuerdo, también “se transformarán en huellas digitales de forma automática aquellas publicaciones que se registran en el Depósito Legal Digital y que los titulares hayan autorizado previamente, para, posteriormente, intentar eliminar esas copias ilícitas”.
Como informó el Instituto Autor, en el mes de julio CEDRO presentó el “Observatorio de la Sostenibilidad de la Cultura Escrita”, una iniciativa del sector editorial, cuyo principal objetivo es llevar a cabo un análisis de la situación de los derechos de autor del sector editorial en España.
Los datos publicados por el Observatorio señalaban que en el año 2020 la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) situó a la industria editorial española como la tercera industria editorial a nivel internacional con mayor cuota extranjera de mercado con un 11,4%, por detrás de Canadá, con un 36,6%, y de Reino Unido con un 35,1%. A pesar de lo anterior, los datos del Observatorio también mostraban que en el año 2022, el 27,5 % de los accesos a páginas webs con contenido puesto a disposición del público de forma ilícita fueron de contenido editorial, lo que supone un crecimiento del 59,14 % con respecto al año 2021.
Fuentes: Biblioteca Nacional de España (Una iniciativa pionera de CEDRO y la BNE utilizará huellas digitales contra la piratería editorial).
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